Síntomas y causas del síndrome de vómitos cíclicos
En esta sección:
- ¿Cuáles son los principales síntomas del síndrome de vómitos cíclicos?
- ¿Cuáles son algunos otros síntomas del síndrome de vómitos cíclicos?
- ¿Cuáles son las fases del síndrome de vómitos cíclicos?
- ¿Cómo varían los síntomas en las fases del síndrome de vómitos cíclicos?
- ¿Cuándo se debe buscar ayuda médica?
- ¿Qué causa el síndrome de vómitos cíclicos?
- ¿Qué podría desencadenar un episodio de vómitos cíclicos?
¿Cuáles son los principales síntomas del síndrome de vómitos cíclicos?
Los síntomas principales del síndrome de vómitos cíclicos son ataques repentinos y recurrentes, conocidos como episodios, de náuseas y vómitos intensos. La persona podría vomitar varias veces por hora. Los episodios pueden durar desde unas pocas horas hasta varios días. Los episodios pueden hacer que la persona se sienta muy cansada y somnolienta.
Cada episodio del síndrome de vómitos cíclicos tiende a comenzar a la misma hora del día, durar el mismo tiempo y suceder con los mismos síntomas e intensidad que los episodios anteriores. Los episodios pueden comenzar en cualquier momento, pero a menudo comienzan durante las primeras horas de la mañana.
¿Cuáles son algunos otros síntomas del síndrome de vómitos cíclicos?
El síndrome de vómitos cíclicos puede incluir uno o más de los siguientes síntomas:
- arcadas, es decir, tratar de vomitar pero sin que salga nada de la boca, conocido también como vómito seco
- dolor en el abdomen
- somnolencia anormal
- palidez de la piel
- dolor de cabeza
- inapetencia
- no querer hablar
- babear o escupir
- sed extrema
- sensibilidad a la luz o al sonido
- mareo
- diarrea
- fiebre
¿Cuáles son las fases del síndrome de vómitos cíclicos?
El síndrome de vómitos cíclicos tiene cuatro fases:
- fase de pródromo
- fase de vómitos
- fase de recuperación
- fase de bienestar
¿Cómo varían los síntomas en las fases del síndrome de vómitos cíclicos?
Los síntomas variarán a medida que la persona pase por las cuatro fases del síndrome de vómitos cíclicos.
- Fase de pródromo. Durante esta fase, la persona siente que viene un episodio. Esta fase, a menudo marcada por sudoración intensa y náuseas, con o sin dolor en el abdomen, puede durar desde unos minutos hasta varias horas. La piel puede estar inusualmente pálida.
- Fase de vómitos. Los síntomas principales de esta fase son náuseas, vómitos y arcadas fuertes. En el pico de esta fase, la persona podría vomitar varias veces por hora. Podría estar:
- callada pero capaz de responder a las personas a su alrededor
- incapaz de moverse e incapaz de responder a las personas a su alrededor
- retorciéndose y gimiendo con dolor intenso en el abdomen
Las náuseas y los vómitos pueden durar desde unas pocas horas hasta varios días.
- Fase de recuperación. La recuperación comienza cuando la persona deja de vomitar y de sentir arcadas, y tiene menos náuseas. Se puede sentir mejor gradual o rápidamente. La fase de recuperación termina cuando paran las náuseas y se recuperan el color de la piel, el apetito y la energía.
- Fase de bienestar. Esta fase se presenta entre episodios. La persona no tiene síntomas durante la fase de bienestar.
¿Cuándo se debe buscar ayuda médica?
Se debe buscar ayuda médica si:
- los medicamentos que el médico recomendó o recetó para la fase pródromo, no alivian los síntomas
- el episodio es intenso y dura más de varias horas
- la persona no puede consumir alimentos o líquidos durante varias horas
Se debe buscar ayuda médica de inmediato si se tienen signos o síntomas de deshidratación durante la fase de vómitos. Estos signos y síntomas pueden incluir:
- sed extrema
- orinar con menos frecuencia de lo normal
- orina de color oscuro
- resequedad en la boca
- piel menos turgente, es decir, la piel no se alisa después de halarla (levantarla) suavemente y soltarla
- hundimiento de los ojos o las mejillas
- mareos o desmayos
Los padres o la persona encargada de un bebé o niño pequeño deben buscar atención médica de inmediato si el pequeño presenta signos y síntomas de deshidratación durante la fase de vómitos. Estos signos y síntomas pueden incluir:
- sed
- orinar menos de lo normal o no mojar los pañales en 3 horas o más
- falta de energía
- resequedad en la boca
- llanto sin lágrimas
- piel menos turgente
- hundimiento de los ojos o las mejillas
- comportamiento inusualmente irritable o somnoliento
¿Qué causa el síndrome de vómitos cíclicos?
Los expertos no saben a ciencia cierta qué causa el síndrome de vómitos cíclicos. Sin embargo, algunos expertos consideran que las siguientes afecciones podrían desempeñar un papel:
- problemas con las señales nerviosas entre el cerebro y el aparato digestivo
- problemas con la forma en que el cerebro y el sistema endocrino reaccionan al estrés
- mutaciones en ciertos genes que están asociadas con una mayor probabilidad de presentar el SVC
¿Qué podría desencadenar un episodio de vómitos cíclicos?
Los factores que desencadenan un episodio de vómitos cíclicos podrían incluir:
- estrés emocional
- ansiedad o ataques de pánico, especialmente entre los adultos
- infecciones, como resfriados, gripe o sinusitis crónica
- emoción intensa antes de eventos como cumpleaños, días festivos, vacaciones y salidas escolares, especialmente entre los niños
- falta de sueño
- agotamiento físico
- alergias
- temperaturas extremas de calor o frío
- consumo de alcohol
- periodos menstruales
- mareo por movimiento
- periodos sin comer (ayuno)
Comer ciertos alimentos, como chocolate, queso y alimentos con glutamato monosódico (MSG) (en inglés) podría desempeñar un papel en la activación de los episodios.
El contenido de esta publicación es proporcionado como un servicio del Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés), parte de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés). El NIDDK traduce y comparte los resultados de sus investigaciones para incrementar el conocimiento de salud y las enfermedades entre pacientes, profesionales de la salud y el público en general. Las publicaciones producidas por el NIDDK son cuidadosamente revisadas por los científicos del NIDDK y otros expertos.